Mirada de Mujer: FIESTA DE PRIMAVERA

OSTARA, Diosa del Amanecer o del despertar, de lo que empieza a nacer y germinar. Esta festividad de tradición pagana celebrada durante el Equinoccio de primavera, marca el fin del invierno.

Simbólicamente hablando y de acuerdo con la creencia Wiccana, Ostara es la época en el que la Diosa despierta de su descanso, saliendo de su sueño y cubre la tierra de fertilidad. Pasea por los verdes campos y se deleita en la abundancia de la naturaleza. En Ostara las horas del día y la noche son iguales, la luz está reemplazando a la oscuridad

Por eso este tiempo esta caracterizado por los colores rosa, verde claro, amarillo; las plantas como el Narciso, Violeta, Aulaga, Olivo, Peonia, Lirio; los aromas del benjuí, violeta, rosa, jazmín. Ve la sección de Inciensos; las bebidas como los vinos, jugos de frutas y té herbal y las comidas preparadas con semillas de girasol, brotes de verduras hojosas, platillos perorados con flores. Es propio desarrollar trabajos en tu jardín, plantar aprender y experimenta todo lo que tenga que ver con las hierbas, infusiones, propiedades mágicas; todo el renacimiento de la tierra representado en el huevo.

Pero en mi afán de encontrar correspondencias, di con el paralelismo entre los siguientes símbolos, que ustedes mismos juzgaran.

“[…] Ēostre es la Diosa germánica de la primavera iba acompañada de un fiel conejo que, para honrarla, puso unos huevos sagrados que decoró pintándolos con vivos colores. La Diosa quedó tan contenta con el regalo que quiso compartir su gozo con los humanos. Pidió al conejo que fuese repartiendo aquel regalo por el mundo. Por eso, se decoran y adornan huevos que se colocan en el altar como decoración o se llevan como talismán de fertilidad. Los huevos de Ostara simbolizan la eternidad y la unidad […]

Una leyenda pagana cuenta que el amanecer del equinoccio un conejo blanco surgía de la profundidad del bosque y escondía huevos de oro en los huecos de los árboles. Quienes los encontraran tendrían abundancia durante todo el año.

Para los celtas este era el festival de “Lady Day” durante el cual celebraban el regreso de la doncella (la diosa virgen) tras su largo letargo invernal (durante el cual la diosa es considerada la anciana/hechicera) […]

En la mitología grecolatina es el momento en que Perséfone regresa del Inframundo. Perséfone era hija de Deméter, diosa de la agricultura, la fertilidad y la tierra. Fue raptada por Hades, dios del inframundo, quién se enamoró perdidamente de ella. Su madre, presa de la tristeza, provocó la esterilidad de los campos. Finalmente se acordó que Perséfone pasaría la mitad del año en el inframundo (el invierno) y la otra mitad del año junto a su madre, Deméter, en el mundo de los vivos (primavera). Mientras Perséfone se halla en el inframundo su madre está triste y nada crece en la tierra”[1].

En la prehistoria, según Wikipedia “se piensa que el origen de la tradición de comer huevos al finalizar el invierno es una reminiscencia de la Edad de Hielo. Tras el duro invierno, y cuando apenas quedaban provisiones, con la llegada de la primavera volvían las aves desde el sur y empezaban a poner huevos, de los que se alimentaban los hombres hasta que podían volver a cazar con la llegada de mejores temperaturas”[2]

En esta página, 13 LUNAS de la cual sustraigo la mayor parte de la información que les relato, encontré la mayor correspondencia con las tradiciones judéo-cristianas, y tal cual se los quiero trasmitir.

“La Pascua es la fiesta cristiana que celebra la victoria del dios de la luz (Jesús) sobre la oscuridad (muerte), lo que parece estar absolutamente encajado con las tradiciones paganas en esta estación. Irónicamente el nombre “Easter”, pascua en ingles, fue tomado de una diosa lunar teutónica, Eostre, que a su vez cedió su nombre a la hormona femenina: estrógeno, estaba representada por un conejo debido a su fertilidad y por el huevo como origen cósmico del universo.

Su fiesta se llevaba a cabo en la Luna Llena del Equinoccio Vernal. Por supuesto, la iglesia no celebra las lunas llenas así que, la Pascua se celebra siempre el primer domingo, después de la primera luna llena, después del Equinoccio, aún así, si el Domingo de Pascua cayera en Luna Llena, se tiene que posponer hasta el siguiente domingo.

Además de esto, es la época del año en que la Diosa o el Dios descienden al inframundo. Quizás se pueda notar esto de mejor forma en la tradición cristiana. Comenzando con la muerte en la cruz el viernes Santo, se dice que Jesús desciende a los infiernos durante los tres días que permanece en su tumba.

Pero al tercer día (el domingo de Pascua), su cuerpo y alma renacen de la muerte y ascienden al cielo. Relacionando esto con el aspecto lunar de la Diosa, se trata de los tres días en que la luna no aparece en el cielo (Luna Nueva)”[3].

Si desean encontrar más rituales y deliciosas recetas asociadas con esta época, no olviden consultar esta página. http://www.13-lunas.com

Por otra parte Ostara es también la segunda etapa energética del año, en algunos lugares este día es festejado como primero del año, ya que el Sol entra en el primer signo del zodíaco. El primer signo del zodíaco es Aries “es el signo del zodiaco del inicio, está relacionado con el cambio de estación, el inicio de la primavera, es el punto de unión del ecuador celeste y la eclíptica, astrólogos y astrónomos utilizan el punto 0 de Aries para empezar las coordenadas de ubicación de las estrellas en el cielo. […] es la puerta de entrada a la energía que vivifica la tierra, primer signo de fuego, cardinal que nos lleva a buscar con fuerza y vigor nuestro destino”.

Como dato curioso este año en especial el planeta Urano acaba de entrar al signo de Aries desde el 11 de Marzo de 2011. “[…] Desde hace 84 años no tocaba a Aries Urano, es curioso que su ciclo alrededor del sol dura 84 años, su descubridor (Herschel) murió cuando cumplió los 84 años. Hace 84 años, en 1927 tuvimos grandes descubrimientos y grandes cambios, por ejemplo empezó la electricidad en el hogar, también se hizo el primer vuelo trasatlántico y se hizo la primera llamada transatlántica.

Urano está en Aries desde el 2011 hasta 2018, nos trae grandes revoluciones humanas, grandes descubrimientos y mucho fuego de los dioses como Prometeo, que dio a los hombres un fuego robado y por eso se ganó un gran castigo en el Cáucaso y los hombres la caja de Pandora. Así como la revolución francesa trajo los derechos humanos, también trajo la guillotina y rodaron muchas cabezas antes de estabilizarse, igualmente las revoluciones en nuestra sociedad tienen un costo moral, social y físico, pero estoy seguro que nos llevan a entender mejor y más profundamente al ser humano en su auténtica naturaleza y a tener una mejor vida para las generaciones venideras y con mayor libertad para nosotros mismos […]

(Aunque el autor no lo dice, nos invita a preguntarnos)

Que nos esclaviza?
Como nos liberamos de esos viejos reyes internos?
Donde está nuestra fuerza de voluntad?
Como utilizamos nuestra inventiva para salir airosos de nuestra propia prisión moral o social?
Los rituales que realizamos tienen sentido o solo lo hacemos porque siempre se han hecho?
Vamos a ser los héroes de nuestra historia personal o las víctimas de la vida y del destino que otros o el pasado o la moral escogen por nosotros”[4].

Estos datos no solo interesantes dejan planteadas inquietudes en nuestro proceso de ser mejores personas, así que para regar la semilla, que mejor que las siguiente frase para iniciar esta época de nacimiento y fertilidad.

“Dar batalla hoy en las revoluciones no necesariamente es salir a la calle a pelear con alguien, las revoluciones deben darse en el corazón, en la mente y en nuestro cuerpo”[5].